sábado, 4 de agosto de 2012

Teatro




Cerrá los ojos. No pienses. Respirá. Movete. Nadie te ve. Sentí. Bailá. Hacé algo original que nunca antes hayas hecho. Escuchá a tu cuerpo. Hablá. Decí lo que quieras. No lo pienses. Dejá que las palabras salgan solas. Seguí moviéndote con esa nueva forma. Se protagonista de este momento. Grita. Callá. Cantá. Mirá por primera vez. Deja que las cosas vengan hacia tus ojos, y no al revés. Sentí. Llorá. No pienses. Mirá para adentro. Fijate como estás ahora. Como está tu cuerpo. Reite a carcajadas. Desmayate. Volvé a despertar. Se consciente. Fijate donde tenes guardado el miedo. Sacalo afuera. Fijate donde tenes el amor. Hacelo forma. Fijate donde están las angustias. En que parte del cuerpo guardás las angustias. Sacalas afuera. Dirigí tu vida. No pienses más. Destruí cada uno de los pensamientos que se te vienen a la cabeza, como si fueran burbujas que las tocas y desaparecen. Conectate con el otro. Miralo por primera vez. No esperes nada del otro. Movete y hablá sin expectativas. Todo es nuevo. Viví.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Aprovechando también leí esta entrada y me gustó mucho.

Mona dijo...

Muy cierto, no hay q esperar nada de nadie, y tal vez te sorprendas....

Anónimo dijo...

Me encanto!!!!! :D