sábado, 9 de mayo de 2009

No siento los besos


En la era de la virtualidad uno está más comunicado con todo el mundo o eso es simplemente lo que parece. Uno se reencuentra con viejos amigos, viejos conocidos, y hasta viejos desamores. La cuestión es que si uno dejó de hablar con esa persona alguna vez, por algo será y no deberíamos volver a unirnos virtualmente. Por otro lado, uno llama menos por teléfono y chatea más con sus amigos, familiares y amores. Se pierden en este proceso miles de expresiones y muchas veces se generan mal entendidos que la lengua escrita no deja claros como una voz, como un gesto, como un tono, como una mirada. También, la virtualidad acorta las distancias, claro. Uno puede mantener una relación a la distancia mucho más fácilmente (?) que años atrás. Uno puede escuchar y ver al otro todo el tiempo a pensar de los kilómetros entre ese otro y nosotros. Pero la virtualidad destruye muchas cosas. La virtualidad enfría aquello que debería arder. La virtualidad nos hace creer en algo que no es más que imagen y sonido como si eso fuese un encuentro real entre dos seres humanos. En la virtualidad los "jajaja" no son risas ni carcajadas alegres, los perfumes corporales no existen, los abrazos no aprietan, los amores no se tocan, los emoticones no emocionan,  las miradas son frías, y los besos no se sienten. 

6 comentarios:

Anónimo dijo...

excelente texto
basta de jaja, de ok, de sip
apaguemos las maquinas y mandemonos todos a mudar a otros lugares
ya lo dijo Baudrillard:
"requiem para los media"

Juan

Juan Pablo dijo...

La verdad es que nunca me ha gustado la tecnología, y heme aquí, tengo un blog en el que pretendo ser leído, y leo el de otros. Comparto tu opinión acerca de estas cosas, pero tal vez, esto se está convirtiendo algo de lo que no te puedes escapar.

Ale dijo...

¿Por qué nos empeñamos en comparar lo virtual con el contacto?

Hace muchos años, no existía el teléfono, no existían los celulares y si existían las cartas. ¿Alguien comparaba las cartas con el contacto físico?

Cuando uno elige chatear en lugar de verse, o hablar por teléfono en lugar de juntarse, esta dejando más que en claro que NO HACE FALTA VERSE.

Es claro el mensaje, es una relación que dada las circunstancias no debería haber continuado, y por ende, sobrevive porque desarrollamos medios más cómodos e impersonales.

De ninguna forma uno reemplaza al otro.

¡BASTA DE COMPARAR!

Ale dijo...

Continuo...

Como bien dijiste, vos no elegís no verte con esta persona, sino que simplemente no se puede.

Nuevamente la virtualidad no reemplazo al contacto real, simplemente te permitió sobrevivir a un contexto que probablemente sin esta opción estaría terminado.

No entiendo, hablas de lo virtual como si fuera un mal que padecemos, en lugar de un bien al cual podemos acceder si así lo deseamos.

La virtualidad nos generó nuevas opciones de relacionamiento. No para aquellas que ya existían, sino para aquellas que no podrían ser de otra manera.

Lo único que te pasa, es que estas triste por tu situación y la virtualidad te da alimento que no llena. Nunca debiste creer que con unos mails, skype o un poco de chat, ibas a poder soportar mas tiempo que sino hubieras hablado nunca, desde la última vez.

MQDLV dijo...

Estoy de acuerdo. Y además, me parece que la virtualidad genera cierta ansiedad inútil y en sus tiempos anula las esperas valientes que construyen. Beso!

Santi dijo...

Coincido con Ale, sin esta tecnología yo no sabria que pasa por tu cabeza por ejemplo. No hay que renegar de eso, sino usarlo para lo que sirve, que es para mucho!